En general prefiero los parques nacionales y los viajes largos, pero me también me gustan mucho los city tours (un viaje de algunos días a una ciudad, con la finalidad de conocer solo esa ciudad). Con Benjamín siempre disfrutamos de un buen city tour, así que decidí compartir con ustedes algunos consejos para que puedas sacarle el mayor provecho a tu próximo city tour.
#1 Tener un buen mapa
Si no conoces bien el lugar un mapa te ahorrara varios dolores de cabeza, además es una herramienta muy útil a la hora de decidir que vas a hacer o de medir distancias.
En general un buen mapa muestra las estaciones de metro/tranvía, los paraderos de buses, los sitios turísticos, el correo y las oficinas de información. Básicamente todo lo que necesitas, en algunas ciudades además existe un mapa exclusivo para el transporte.
Me gustan los mapas gratis, en las grandes ciudades encontrar uno es bastante fácil, los puedes buscar en: los hoteles, estaciones de buses/trenes, aeropuertos y en las oficinas de información turística, los mapas gratis pueden ser bastante buenos, sino encuentran siempre pueden comprar alguna mini guía del lugar. Otra forma es descargar aplicaciones para smartphones o tablets, pero en mi opinión no hay nada mas cómodo que un buen mapa de papel.
#2 Viajar en temporada baja
Viajar en temporada baja tiene algunas ventajas a la hora de un city trip: hay menos personas y los precios son mas bajos. En algunas ciudades el clima es importante, invierno significa “temporada baja”, por ejemplo Roma en enero, Ámsterdam en noviembre y Bilbao en febrero. Si el clima esta muy malo, siempre puedes visitar algún museo o realizar alguna actividad bajo techo. Quizás necesitaras un paragua, pero también existe el buen clima en temporada baja. En estos tres ejemplos conseguimos muy buen precio en el alojamiento y en los pasajes.
#3 Viajar durante la semana
En general hay menos visitantes que durante el fin de semana, además se pueden conseguir buenos precios, por ejemplo viajar en avión es mas caro entre el viernes y lunes, también hay hoteles que cobran mas los viernes y sábado.
#4 Elegir con cuidado el alojamiento
No importa que elijas, camping, hostal, hotel o arrendar un departamento. Siempre hay que buscar 3 cosas: la ubicación, que ofrece el alojamiento y que hay alrededor.
Hay que comparar, en algunos casos es preferible pagar un poco mas por un lugar en el centro de la ciudad que perder 3 horas en tren todos los días.
Casi siempre esto va de la mano, mientras mas lejos este el alojamiento, mas barato será. Siempre hay que buscar un equilibrio entre el precio y la ubicación. Es importante saber que hay alrededor del lugar donde alojes: estacionamientos, transporte publico, supermercados. En algunos hostales también es posible cocinar, con lo cual ahorras bastante.
En Ámsterdam una amiga nos llevó a un camping a las afueras de la ciudad y muy cerca de una estacion de tranvía, el camping tiene estacionamiento gratis, lo que nos dio la posibilidad de conocer la ciudad utilizando el transporte público, algo muy bueno ya que manejar en Ámsterdam es bastante complicado. Para nosotros esta opción fue la mejor.
En Roma encontramos un hotel bastante lujoso a un precio increíble (pagamos menos que en un hostal en Australia), solamente por que estaba bastante lejos del centro y del metro. Para nosotros no fue un problema ya que el hotel tiene un servicio de acercamiento gratis, durante todo el día tiene minibuses que te dejan o buscan en la estación del metro.
#5 Levantarse temprano
Quizás puede ser algo difícil, pero madrugar es una de las mejores maneras de disfrutar un city tour. Las razones son muchas, unos ejemplos:
- En Ámsterdam, Ben tuvo que esperar solamente 2 minutos para entrar al famoso museo de Van Gogh porque llegó cuando lo estaban abriendo, además lo visitó casi sin personas. Al final cuando salió del museo había una larga fila para entrar y el museo ya estaba lleno. En la misma ciudad visité el Rijksmuseum a la misma hora, donde no había fila por ser temprano.
- En Kioto, madrugamos para pasear por el barrio Gion, cuyas calles siempre están abarrotadas de personas. A las 6 de la mañana parece otro mundo, Ben tuvo la oportunidad de tomar algunas fotografías muy interesantes y lo disfrutamos mucho.
- En Roma, llegamos temprano para hacer la fila para conocer el Museo Vaticano, la fila crece a cada minuto. Si bien esperamos una hora y media en la fila para comprar las entradas, es un tiempo razonable para este lugar. Además Ben aprovecho el tiempo para sacar algunas fotografías en la plaza de San pedro vacía, mientras mis padres y yo esperábamos en la fila.
Es bueno madrugar, pero no significa que lo tienes que hacer todos los días, ya que puede resultar agotador, en general con Ben planificamos bien las actividades y madrugamos 1 vez cada 3 o 4 días, a veces nos quedamos medio día durmiendo en el hostal cuando estamos muy cansados.
#6 Elegir y planificar las actividades
Por supuesto no es necesario planificar cada minuto del día, pero para disfrutar al máximo un city tour debes organizar un mínimo de cosas , en especial si quieres visitar lugares con horarios o donde siempre hay filas.
Debes aceptar que quizás no veras absolutamente todo lo que deseas ver, lo mejor es seleccionar lugares y disfrútarlos bien, no es una buena idea correr todo día. Es imposible conocer todo Paris en una semana por ejemplo.
En Ámsterdam decidimos visitar los museos temprano para tener el resto del día libre, ya que viajamos al lugar con algunos amigos. Por esta razón nos tomamos la mañana para hacer actividades y la tarde para disfrutar la ciudad tranquilamente, en el caso contrario nos perdíamos el museo o parte del día con nuestros amigos.
En Buenos Aires visitamos la Casa Rosada, ahí también hay un horario de visita.
#7 Caminar todo lo posible
Ben siempre dice que le gusta perderse en las ciudades, pero no por el hecho de perderse en si, sino que le gusta caminar sin rumbo, buscando algunos rincones olvidados por los turistas y disfrutarlos con todo el tiempo del mundo.
Siempre que puedas camina, es barato y te permite ver la ciudad de una manera diferente.
En nuestros viajes hemos caminado mucho en ciudades como Paris, Buenos Aires, Sídney, Cusco y Roma. Uno de mis mejores recuerdos fue en Japón, en Kioto decidimos volver al hostal sin una ruta definida, en un momento vimos que estábamos muy cerca de un complejo de templos (Myoshin-ji), resultó ser un lugar espectacular, recorrimos los jardines y las construcciones absolutamente solos, es un lugar muy tranquilo que nos encantó. Lo conocimos solamente por que decidimos caminar y buscar otra estación de tren.
#8 Buscar actividades y visitas gratis
En el grandes ciudades siempre hay un montón de actividades gratis como: visitas guiadas, museos, exposiciones y conciertos. Hay algunas paginas especializadas en esto y basta un pequeño paseo por Google para descubrirlas, también es útil visitar la oficina de información turística.
En Nagoya, Japón tuvimos la oportunidad de asistir a un concierto en la calle, compramos algunas cervezas en un 7-eleven y lo disfrutamos junto a algunos japoneses muy simpáticos que se acercaron a conversar con nosotros.
#9 Entrar a un supermercado
No importa que no necesites nada, entrar a un supermercado en otro país puede resultar muy interesante y entretenido. Los productos de un supermercado en Japón, Tailandia o Perú son distintos a los que venden en tu país. Además si quieres ahorrar dinero y no quieres ir a un restaurant, es una de las mejores maneras (junto a los mercados) de descubrir los alimentos del lugar.
En Tacna, Perú, pasamos bastante tiempo descubriendo, tocando y oliendo las frutas y verduras en un supermercado, en ese lugar descubrí las granadillas, una fruta andina que no conocía.
#10 Ser cuidadoso
Los city tours están asociados a lugares muy turísticos y en estos lugares siempre hay carteristas, fraudes y engaños mochileros. Hasta ahora por lejos las ciudades donde vi mas engaños en la calle son Paris y Bangkok, pero fue en Santiago donde me robaron el celular y en Colonia donde le robaron la billetera a mi padre.
Si quieres saber mas sobre el tema, no te pierdas Engaños y fraudes mochileros, en los que caímos y en los que no.
Un robo no necesariamente significa que tu viaje se arruino, pero de seguro es algo desagradable.
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