Tengo una relación personal con este libro, es parte de mi biblioteca de viaje desde 2011, cuando le escribí a su autor, Juan Pablo Villarino, un correo pidiéndoselo. En ese tiempo me encontraba en Blenheim, Nueva Zelanda. Trabajando en viñedos inmerso en una obligada rutina, la necesidad de generar recursos para continuar viajando era esa obligación. Un día un llamado rompió esa rutina, era la oficina de correos para decirme que tenían algo para mí, el libro. Perdí 3 días de trabajo, ya que durante ese tiempo no fui capaz de trabajar devorando sueños ajenos hechos propios.

Un viaje a dedo por países en guerra

Vagabundeando en el Eje del Mal es un relato de un viaje. Donde el protagonista desciende al infierno en la tierra solo para encontrar personas normales, viviendo vidas normales.  En 2005 Afganistán e Irak no estaban dentro de los destinos turísticos mas populares,  la invasión a Irak había comenzado 2 años antes y la guerra de Afganistán llevaba  4 años, el entonces presidente de los Estados Unidos George W. Bush describía a la región como parte del eje del mal junto con Corea del Norte, según el colectivo occidental había que estar loco para emprender un viaje a la zona y para que decir de un viaje a dedo.  A través de sus páginas nos damos cuenta  que la mayoría de las personas en el mundo son personas simples que quieren lo mismo.  Alguien en Chile, Francia o Argentina busca vivir bien y tranquilo, quiere lo mejor para su familia, busca estabilidad.  ¿Por qué va a ser distinto en Irán, Siria, Afganistán o Irak?

Durante 27 meses podemos seguir al protagonista a través de Turquía, Siria, Egipto, Irak (Región Autónoma de Kurdistán), Irán y Afganistán. Es un viaje largo y durante el disfrutamos de la alegría de descubrir cosas nuevas, la incertidumbre en cada frontera o lugar conflictivo, el miedo, el amor de una linda chica lituana. La mezcla de sentimientos que genera este libro a través de sus páginas es muy variada y sobrecoge.

El lado amable de la religión musulmana

Uno de los puntos importantes es la religión vista por el ojo laico del protagonista. Juan puede ver el lado amable de la religión musulmana, ese que no muestra la televisión pero que representa casi a todos los musulmanes. Los grupos extremistas existen pero son una minoría dentro del universo musulmán y esto es reflejado a través los actos de los personajes que representan a este universo.

Podemos ver imágenes del viaje mientras leemos el libro, lamentablemente las imágenes no son de muy buena calidad. Es una lástima ya que se percibe lo sublime de los paisajes o las emociones de las personas a través de cada pequeño cuadro en blanco y negro, algunas veces subexpuesto,  sobreexpuesto o simplemente mal enfocado. Las fotografías en color son 18, están a la mitad del libro y son una colección de momentos comunes en oriente medio. La fotografía dentro del libro es un plus al libro en sí y de manera alguna opaca el relato de Juan.

Muchas personas que quieren recorrer el mundo nunca salen de las fronteras de su ciudad mas que un par de semanas una vez al año. El miedo a salir de su zona de confort es el la primera causa de ello. Este libro se puede ver como una guía para tomar la decisión de agarrar la mochila y salir a aumentar esta zona de confort. Con un presupuesto de 5 dólares por día Juan nos muestra como el cumplió su sueño y nos deja con la sensación de que nosotros también podemos. Es un libro motivacional que se encargará de inclinar la balanza en el caso de que estés queriendo cumplir tu sueño de recorrer el mundo.